EL PODER DE LA PRESENCIA

Pensamiento Para El Día
Mi presencia puede recordar a otros la presencia de Cristo.

LEER Marcos 14:32 – 42
[Jesús] les dijo: «Siento en mi alma una tristeza de muerte. Quédense ustedes aquí, y permanezcan despiertos».
Marcos 14:34 (DHH)
A los 22 años, cuando me hice pastor, vivía con temor a tener que cumplir el deber sagrado de conducir un sepelio. No
sabía qué habría de decir o hacer.
En mi primer día como pastor, Hill, un líder experimentado de la congregación de unos 70 años, me dijo: «Usted es
nuestro pastor. Díganos qué hacer, nosotros lo seguiremos». Su confianza me dio valor para guiarles. Pero dos meses
más tarde, Alma, la esposa de Hill, me llamó para informarme que él había fallecido. Ante esta pérdida, me sentí incapaz
de hacer algo útil para Alma o para la iglesia.
Visto que los arreglos para el funeral se hicieron durante los dos días siguientes, llegué a pronunciar algunas palabras y
oraciones. Pero en general simplemente me senté junto a Alma, tomé su mano y compartí su pena. Alma me dijo que no
podría haberlo superado sin mí. No fueron palabras elocuentes o grandes gestos lo que marcaron la diferencia: fue estar
presente.
Dios vino en la persona de Jesús para estar presente junto a nosotros. Pero es posible que estemos tan ocupados
intentando ser útiles que nos olvidemos de estar nosotros mismos presentes junto a Dios. Al prepararnos para celebrar
el nacimiento de Cristo, no nos olvidemos de pasar un tiempo santo, sentados en calma y sumergirnos en la presencia
del Emanuel.
Oración: Señor, ayúdanos a estar presentes de manera intencional para poder conectarnos contigo y con quienes nos
rodean, aun en medio del ajetreo de nuestros días. Amén.

Sr. Kevin Thomas (Alabama, EE. UU.)

OREMOS: POR LAS PERSONAS QUE HAN ENVIUDADO