¿ES POSIBLE HABLAR DE DIOS?

TEXTO BÍBLICO
El Señor es bueno; es un refugio en horas de
angustia: protege a los que en él confían.
Nahúm 1: 7

Para comprender por qué la diferencia entre el antiguo y nuevo testamento, debemos entrar en contexto, en el tiempo en que Nahúm escribía, el pueblo de Israel estaba siendo sometido bajo el dominio de los Asirios cuya capital es Nínive, si, la misma ciudad que hacía ya 100 años se había arrepentido y recibido el perdón de Dios cuando el profeta Jonás les predico.
La herramienta literaria que utiliza el profeta Nahúm es la de embellecer el discurso con el fin de magnificar cómo será la destrucción de aquel imperio invasor, tal como Alonso de Ercilla lo hizo para describir la valentía y arrojo del pueblo mapuche cuando se enfrentaba al ejército invasor español; no obstante Nahúm nos da a entender tres cosas que son importante en destacar.

1) Todos tienen la opción del perdón cuando hay arrepentimiento genuino.
2) Dios en un refugio en tiempo de angustia y protege a quienes confían en él.
3) En la actualidad lamentablemente nos encontramos con los ríos secos, las montañas derretidas, el mar contaminado.

Para concluir debemos tener presente que Dios es nuestro refugio y que debemos ser refugio de quienes más lo necesitan, del inmigrante, de los enfermos, de los pobres, de los niños, de los adultos mayores. Ustedes como jóvenes, son los llamados a cambiar el mundo en todo sentido y seguir con el legado que nos dejó John Wesley que es la de amar a Dios, amar y ayudar al prójimo y cuidar el medio ambiente que es la fuente de sustento que Dios nos dejó para toda la humanidad.
Por lo tanto, debemos estar siempre agradecidos de como Dios hasta este tiempo ha sido nuestro refugio y del hecho de estar reunidos el día de hoy leyendo esto, es motivo de alegría porque independiente como este nuestro entorno, Dios nos cuida y nos permite disfrutar de su creación cada vez que abrimos nuestros ojos. Nuestro deber es: Mantener y cuidar el medio ambiente, Amar y ayudar a los necesitados y amar a Dios.

ORACIÓN
Señor ayúdanos a valorar el don de la vida y a responder favorablemente la administración de ella. Amén.